San Carlos, o Sant Carles de Peralta en su nombre completo ibicenco, es un encantador y tranquilo pueblecito del municipio de Santa Eulalia, situado al nordeste de la isla, en el interior. A pesar de su reducido tamaño, es muy conocido por haber sido una zona de comunas hippies en los 60 y 70, por ubicarse allí el famoso mercadillo de Las Dalias, un lugar muy especial donde se puede comprar ropa, bisutería y toda clase de artesanías. También es conocido como lugar de paso a muchas bellas calas de la zona como Aguas Blancas, Es Figueral, Cala Llenya o Cala Boix.
Cómo llegar a San Carlos
Desde Ibiza basta coger la carretera de Santa Eulalia y tras atravesar la ciudad, bien por el centro bien por la circunvalación, seguir de frente las indicaciones hasta llegar a San Carlos. Para llegar en autobús tendrás que coger primero la línea L13 hasta Santa Eulalia, y desde allí la 16B a San Carlos.
Qué ver en San Carlos
San Carlos es un pueblo muy pequeño y tranquilo que se emplaza en torno a una bonita iglesia encalada de 1785 con un amplio porche con columnas y un pozo tradicional y rodeada de unos agradables jardines y un parque infantil. En torno a ella, diversos restaurantes y bares, y tiendas de ropa, artesanía…
De la época de las comunas hippies que proliferaron en la zona de San Carlos, al pueblo le ha quedado un sabor cosmopolita y creativo que se expresa en la multitud de eventos interesantes que se organizan allí, a pesar de su pequeño tamaño.
Son abundantes las citas culturales como conciertos y exposiciones. Además, en las afueras del pueblo se encuentra el famoso mercadillo hippy de Las Dalias Ibiza, un lugar que merece mucho la pena visitar. El mercadillo abre los sábados durante todo el año, pero en verano también organiza un Night Market los lunes y martes de junio a septiembre, así como conciertos de grandes artistas y citas regulares como la famosa fiesta hippy Namasté, los miércoles por la noche en verano.
Saliendo del pueblo, en dirección a Cala Llenya, se encuentra es Trull de Ca n’Andreu, una antigua y bonita casa payesa del siglo XVIII convertida hoy en un museo donde podrás aprender sobre la vida y costumbres de los antiguos ibicencos. Además, cuenta con una de las pocas almazaras (trull) de la isla. A
Cabe mencionar que hay que aunque San Carlos está en el interior, muy cerca se encuentran preciosas playas como Aguas Blancas, Es Figueral, es Pou des Lleó, Cala Mastella o Cala Llenya.
Dónde comer o tomar algo
Si hay un local que no puedes dejar de visitar en San Carlos es el Bar Anita Ca n’Anneta, que se conserva casi igual que cuando abrió hace 60 o 70 años. Su cocina es sencilla y económica, tiene una estupenda terraza y es el auténtico punto de encuentro del pueblo. Imprescindible probar su licor de hierbas ibicencas artesano.
En el mismo pueblo hay otros lugares muy agradables como s’Argentera, en pleno centro y frente a la iglesia, con especialidad en parrilla, o la pizzería Enfarinarte, un local minúsculo pero que elabora unas pizzas exquisitas con ingredientes ecológicos.
Para algo dulce, la heladería Viccio, una de las mejores de toda la isla.
Los restaurantes de Las Dalias son también muy recomendables y cuentan con una oferta muy variada.
En las afueras del pueblo está también el agroturismo Can Curreu, un lugar precioso que cuenta con un buen restaurante. Y es muy famoso, ya en Cala Mastella, el chiringuito de pescado El Bigotes, uno de los lugares más típicos para probar el “bullit de peix”.
Si prefieres carne te recomendamos Cas Pagès, San Carlos, Ibiza, otro clásico que se encuentra en la carretera entre Santa Eulalia y San Carlos.
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